Bitcoin y Paridad del Poder Adquisitivo

Incluso en congresos académicos, el tema de Bitcoin está lleno de controversia. Si te atreves a presentar un modelo, por muy bien desarrollado que esté, el tema se desviará probablemente hacia temas recurrentes. ¿Puede ser realmente una moneda? ¿Tiene o no tiene respaldo?. En este post haré un esfuerzo por esbozar las preocupaciones más interesantes y problemas sin resolver respecto al uso de esta nueva tecnología.

En primer lugar, la discusión sobre si tiene o no respaldo. En lo personal, creo que el respaldo físico de una moneda está sobrevalorado. Después de todo, la razón por la que una moneda es valiosa no es por que se pueda transformar en algún activo físico, o al menos no considero que sea una razón de peso. Sospecho que esto se podría comprobar realizando una encuesta y preguntando a la gente si espera algún día cambiar sus billetes por las reservas de oro o dólares que tiene el banco central. Especulo que la idea no se les había pasado por la cabeza. Sin embargo, es probable que si se anunciara que las reservas se vaciarán, habría alguna especie de pánico. Creo que si se les preguntara si es importante que existan reservas, la mayoría diría que si, pero no sabría que esperar de respuesta si preguntara por qué creen eso.

Entonces, es posible que el respaldo cumpla con un factor psicológico de seguridad. ¿Sería posible trascender de la necesidad de dicho respaldo? Eso queda como una pregunta abierta para quienes trabajan en la intersección entre psicología y economía, con la idea de buscar su respuesta por medio de experimentos. Las monedas tradicionalmente requerían del respaldo de que el documento que presentan podría ser intercambiado por bienes de un cierto valor ultimadamente, y que este documento sería reconocido por la contraparte. En una moneda virtual, me parece complicado que un agente, al entregar un bitcoin, o cualquier otra moneda virtual, a cambio de algún bien, dude que la contraparte reconozca que lo que se le envió es un bitcoin. El oro o las monedas acuñadas en metales preciosos tenían la misma situación. Por si mismos no son realmente tan valiosos, el mayor peso del valor de una moneda está en su aceptación generalizada, cosa relativamente fácil de lograr por un gobierno. Una moneda extragubernamental tendría que ser extremadamente competitiva, pero ya llegaremos a eso.

En cualquier caso, acepto que he desviado el tema, cuestionando primero si es necesaria la existencia de un respaldo. Supongamos que el respaldo tiene una función. ¿Sería suficiente respaldo el costo de la obtención de la moneda?. Recordemos que para obtener un bitcoin se puede, o bien, comprarlo con alguna otra moneda a cierto tipo de cambio, o «minar». En este caso, la minería de bitcoin significa la resolución de algoritmos para obtener una moneda, que es única e identificable de las demás. La forma del algoritmo hace que su resolución se vuelva más complicada en cada nuevo bitcoin. En un principio, era posible minar bitcoins con una computadora personal. En la actualidad, es necesario usar equipos con ordenadores especializados y el costo de la energía que cuesta minar un bitcoin es sumamente elevado. Al día de esta publicación, 1 bitcoin cuesta 3,848 MXN aproximadamente, por lo tanto el costo tendría que ser inferior a este número para que valga la pena minar. Pero no hay razón para creer que las ganancias en la actualidad son extraordinarias. En todo caso, el costo de la obtención de estas monedas es muy real, y tengo razones para creer que es determinante en la valorización del activo. Sospecho que esto las hace más tangibles a que si sólo fueran impresas y su número determinado por un agente central, es decir, me atrevo a poner en la mesa la idea de que puede resultar más tangible.

Por supuesto, no es algo que se observe en la actualidad, pues son pocos realmente los que están al tanto de la minería de bitcoins, pero si esto se volviera más generalizado, si los programas para minar fueran simples aplicaciones y se pudiera trabajar por ellos, se volverían mas tangibles.

Pero esto no sería tal vez suficiente para que fuera una moneda. Si es aceptada y el usuario se siente respaldado es un primer paso, pero tendría que ser competitiva ante otras monedas. ¿Que es importante para que esto suceda? En primer lugar, una volatilidad como la que presentó en 2014 sería inaceptable, sin embargo, es posible que esto se debiera a su exposición repentina a los medios. En 2015 se ha visto bastante estable, sobre todo si consideramos la volatilidad de monedas emergentes, es posible que haya sido incluso menor (esto sería interesante investigarlo). Hay que recordar que las monedas son también un activo como cualquier otro, su principal diferencia está en la facilidad con que se convierten en bienes y servicios (y en que en la mayoría de los países están regulados e impuestos como único modo de cambio). En teoría, podríamos aceptar acciones de Apple por nuestros bienes. No lo hacemos por que los trámites para hacerlo son muy engorrosos, comparados con el simple cambio de billetes. Se supone que el precio ya contiene la información de las ganancias esperadas, pero no me confiaría tanto en que el mercado haya hecho un cálculo tan correcto.

Digamos que el problema de la volatilidad se resuelve, sea por medio del mercado o alguna otra manera. Los gobiernos difícilmente aceptarán la entrada de una moneda que reduzca sus ingresos por señoreaje. Una moneda que quiera ser parte de la vida cotidiana de los ciudadanos deberá de superar en conveniencia a las demás monedas, aún a pesar de los gobiernos en los que opera. Una manera, sencilla en teoría, difícil de aplicar en la práctica, es que esta moneda refleje apropiadamente la paridad de poder adquisitivo. Esto permitiría a los usuarios tener mayor estabilidad en transacciones internacionales. Sin embargo, para esto, un cálculo apropiado de la paridad de poder adquisitivo sería indispensable, para lo cual en la actualidad no existen sino estimados. ¿Será posible llegar a un cálculo realista? ¿Cómo se podría lograr que la moneda refleje siempre este valor?

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